Sinopsis

Emily y Sloane siempre han sido mejores amigas. Pero, justo antes del que debería haber sido el verano más épico de todos, Sloane simplemente... desaparece. Y lo único que deja atrás es una lista de cosas por hacer.

En ella, hay trece tareas que Emily no haría jamás. Pero ¿y si sirvieran para devolverle a su amiga? ¿Coger manzanas por la noche? Vale, eso es fácil. ¿Bailar hasta el amanecer? Claro. ¿Por qué no? ¿Besar a un desconocido? Eh...

Emily ahora se enfrenta a un verano lleno de sorpresas, aunque contará con la ayuda inesperada de Frank Porter para tachar elementos de la lista de Sloane.

¿Nadar desnuda? Espera... ¿qué?

Autor(a): Morgan Matson
Título original: Since You've Been Gone | Traductor: Miguel Trujillo
N.° de páginas: 384 | Saga: No
Editorial: Plataforma Neo | ISBN: 9788416429042 | Año de publicación: 2015
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Opinión Personal

Celebremos que por fin he podido publicar la primera reseña del año. Pero antes de comenzar a darles mi opinión sobre esta historia, quiero informarles que los libros que reseñaré esta semana —y creo que también los de la próxima— fueron los que leí en diciembre y que por razones personales no pude publicar las respectivas reseñas en su momento.


Ahora bien, empecemos contando que Desde que te fuiste lo compré cuando estuvo de promoción en el Kindle Flash de Amazon el pasado mes de noviembre y que además creo que soy de las pocas personas que no han leído Amy y Roger; así que este fue mi primer encuentro con Morgan Matson.

Sin mucho análisis les puedo decir que, en líneas generales, este libro cumple con la premisa del género al que pertenece; es fácil de leer, nos ofrece una historia entretenida. Me dejó una buena sensación, es decir, gustó y me mantuvo entretenida, a pesar de que me resultó demasiado light.

*Fan-Art hecho sin ánimos de lucro*

La novela gira en relación a la amistad. Está narrada en primera persona por Emily, que tras volver de unas vacaciones con su familia se encuentra con que su mejor amiga, Sloane, ha desaparecido sin ninguna razón aparente; por más que intenta dar con ella buscándola en su casa, llamándola por teléfono o visitando los lugares que solían frecuentar no la ubica. Hasta que llega al punto en que al no saber qué más hacer para encontrarla decide pedir ayuda a sus padres, es ahí cuando se da cuenta de que a su casa ha llegado una carta que contiene una lista de cosas por hacer.

Al leerla deduce que posiblemente la única manera que tendrá para obtener alguna pista del paradero de su mejor amiga es completando las tareas. E inmediatamente trata de ponerse con ello.

Aquí vemos como la trama se va desarrollando sin pausas y con un rumbo bien definido hasta el final. La autora hace uso de flashback en la línea de tiempo para ayudar al lector ha conocer el pasado de estos personajes y así poder entender las razones por la que Sloane le dejó cada uno de esos "retos" a Emily. De este modo, a medida que nos vamos involucrando en la historia resulta bastante clara la intención de su amiga al enviarle la carta.

Debo reconocer que los personajes estuvieron bien desarrollados, son verosímiles y coherentes.

Emily es una chica extremadamente tímida y un poco sosa, es de las que prefieren no destacar ya que le da miedo lucir. A diferencia de Sloane, a la que Emily describe como llamativa, intrépida y simpática que siempre destaca. Gracias a esto es que vemos como entre ellas se va gestando una relación de amistad muy dependiente y poco sana, ya que en el fondo nuestra protagonista se siente afortunada porque Sloane la haya escogido a ella como amiga desde que se conocieron.

Al principio me costó un poco engancharme con la historia. Quizás porque me resultó difícil empatizar con la relación poco sana que tienen estas dos amigas. Para mí es complicado entender que una persona le cueste tomar decisiones por voluntad propia o que no sepa atreverse a hacer nada si no está con esa otra persona de la que depende emocional o psicológicamente. Pero pasado los primeros capítulos, y viendo los cambios que se empezaron a dar en ella a medida que se enfrentaba a sus grandes temores, la trama me fue envolviendo al punto de terminarla en dos sentadas.


Pasados los primeros capítulos descubrí que quién realmente me estaba conquistando era Frank Potter; un personaje que va tomando relevancia a medida que lo vamos conociendo. Él es esa contraparte que enamora por la paciencia que que le tiene a sus amigos, es la definición de madurez y aunque tiene un perfil más bajo logra destacar en la novela. Gracias a él, la historia tiene la dosis justa de romance, a pesar de estar en un segundo plano.

Asimismo, vemos que el personaje principal le permite entrar a otros personajes en su círculo social gracias a la ayuda que le prestan para completar la lista. Estos son bastante pintorescos y le dan el toque divertido a la historia. La verdad es que me hubiera gustado poder conocerlos un poco más a fondo.

Desde que te fuiste es una novela que recomiendo para desconectarse de todo y relajarnos un rato, además de que sirve como corte entre tramas que necesiten mayor concentración o sean mucho más profundas. En definitiva, esta es de esas lecturas que sin muchas pretensiones logra dejar una sonrisa pintada al terminarla.>