Sinopsis

Mia necesita dinero. Mucho dinero. Para ser exactos un millón de dólares. Y además tiene poco tiempo. La vida de su padre está en juego y ella solo tiene un año para saldar sus deudas.
Para ello deberá aceptar un encargo que nunca antes habría imaginado…. Durante todo un año Mia acompañará a lo largo de un mes a un hombre distinto y así conocerá el lujo, diferentes estilos de vida, viajará por muchas ciudades, vivirá experiencias sexuales increíbles…. Y hasta puede que conozca al hombre de su vida.
Doce meses en cuatro volúmenes.
Una experiencia tan sexy, dulce, arriesgada y caliente que tu libro podría fundirse.

Autor(a): Audrey Carlan
Título original: Calendar Girl 1. January February March
Traductores: Vicky Charques / Marisa Rodríguez
N.° de páginas: 432 | Saga: Calendar girl # 1
Editorial: Planeta | ISBN: 9788408157410 | Año de publicación: 2016
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Opinión Personal

¡Hola dulzuras!

Hoy vengo con la reseña de Calendar Girl #1 como muy bien han podido leer en el título de la entrada, este libro está incluido en el reto veraniego que me propuse de unos 18 libros que debo leer antes de mediados de septiembre (creo que debo darme prisa o no lo lograré).

La protagonista se llama Mía Saunders, ella tiene que ayudar a su padre a salir de un gran lío en el que se ha metido, así que se ve en la necesidad de buscar un trabajo que la ayude a conseguir el dinero que él debe a un matón muy enfadado, que ya ha dejado en coma a su padre y amenaza con hacerle daño su hermana y a ella si no se lo pagan. Así que no le queda otra solución que ir a pedirle ayuda a su tía para que le de trabajo en su empresa de Escort.

Las primeras semanas de junio les escribí una entrada informando sobre la serie y dejándoles el primer capítulo del primer libro ya que era uno de los que más llamaban mi atención de los recientemente publicados (esta fue la entrada). Las portadas que han escogido para las ediciones en español son realmente llamativas, yo no soy muy de animal print, pero es que fue ver estas portadas y querer tener los libros en mi colección.


Pero la serie me demostró con el primer libro que tiene un problema, el contenido.

No sé si seré la única que lo diga, pero debo decir para mí el contenido no se sostiene ni obligado. Yo considero que los libros no solo deben tener un concepto central, sino que deben ser trabajados para lograr que la ejecución sea exitosa. Así que aún no logro entender la cantidad de críticas positivas que tiene la serie, porque yo por lo menos en este libro no encontré esos elementos importantes que hacen que una historia sea destacable.

La novela me resultó bastante monótona, algo aburrida y la trama, que es lo esencial, brilló por su ausencia, o quizás sea que yo no entendí que el concepto de esta serie sea cantidades ingentes de escenas sexuales.

La novela está narrada en primera persona siendo Mia la que nos cuenta su historia. Es una chica de que le ha tocado cuidar a su hermana desde que tiene 10 años ya que su familia se fue cuesta abajo cuando su madre los abandonó. Ella se describe físicamente como que está tremenda, pero más allá de eso es poco lo que puedo decir, ya que ninguno de los personajes los sentí bien perfilados.

Reiteradamente, Mía nos dice que solo intenta salvar a su padre y que por eso "se está sacrificando" (SÍ mis comillas son totalmente intencionales, ya que lo de sacrificarse me parece que es solo un cuento para que el lector sienta compasión de su historia).

De resto, poco más puedo decirles de ella salvo que es un tanto mal hablada, sufre de un ligero caso de bipolaridad y es bastante facilona. Porque para haber tantas escenas sexuales, teniendo en cuenta la premisa de la novela, siendo todo justificado con "hoy te quiero locamente, pero mañana ya no te quiero tanto porque es otro mes, otro cliente y debo vivir mi vida" es como demasiado.

Para hablarle de los protagonistas masculinos es mejor que los englobe como si fueran uno solo, ya que material para detallarlos a cada uno por separado no tengo. Además, básicamente todos son lo mismo, la única diferencia son sus profesiones y ciudades.


Poca gracia les encontré a todos. No sé si es porque solo dedican 10 capítulos a cada mes, o porque 3/4 partes de cada mes es sexo compulsivo, pero sencillamente no llegué a sentir adoración por ninguno. Lograr enamorarse de ellos con tan pocas páginas en las que aparecen me resulta totalmente falso. Acepto que los describan como unos adonis y que por las casualidades de la vida, que siempre ocurren en este estilo de novelas, todos son unos dioses del sexo, ¿pero, really, eso es todo? ¿sólo por eso debo enamorarme de ellos? Yo exijo más, lo lamento. No voy a hacer una excepción con esta novela solo porque sí. A mí no me convencieron de sus sentimientos en ningún momento.

No voy a ahondar en las historias sexuales porque sería cometer el mismo error que la escritora; rellenar el contenido hablando de esas escenas que no tienen la menor chispa y que solo se repiten continuamente en todo el libro.

Ahora bien, como no hay mucho más que decir de la novela, voy a aprovechar para hablar de un tema que realmente ya me está moqueando. Hace un par de días leí una entrada que hoy me cae como anillo al dedo. En ella la bloguera hablaba sobre la peor consecuencias de Cincuenta sombras de Grey. La entrada trata sobre que ahora cualquiera se cree capaz de escribir una novela romántica para lograr convertirse en Best Sellers.

Yo no voy a profundizar en el tema porque para eso les dejo la entrada de Desde el Gallinero y así lo debaten con ella. Yo lo que deseo es mencionar un punto importante que ella menciona en ese post y que se relaciona directamente con un punto importante que vi en este libro:

Y lo mismo digo para las editoriales, que no todas las mierdas son auto publicadas, ¡qué va! ya que muchas vienen arropadas por una editorial (de nueva creación o más vieja que Matusalén, eso da igual). Porque se puede comprender que un autor auto publicado no tenga dinero para invertir en su obra, y que esta pase por todas las manos adecuadas hasta que quede correcta (aunque en ese caso, mi consejo es ¡no publiques!); lo que no cabe en mi cabeza, es que las editoriales cada vez más, también prescindan de los servicios de estos profesionales.

¿Por qué menciono este párrafo en específico? Pues porque debo ya decirlo públicamente. No logro entender como ya más frecuentemente está ocurriendo que editoriales de la magnitud de Planeta (disculpen por mencionarlos directamente pero es que con este libro ya sobrepasaron mi límite) estén cometiendo los mismos errores que cometen los escritores auto publicados. Y me refiero a que cada vez más sus libros (más que todos los que vienen bajo el sello Zafiro y Esencia, aunque en Calendar Girl también lo encontré) tienen serios fallos estructurales o de continuidad. Por no hablar de los ortográficos.

Para darles un ejemplo sencillo con esta novela, yo tengo la duda si el chico Alec (chico Febrero) tiene la cabellera negra o dorada casi rojiza, puesto que en distintos momentos dentro de la novela me lo describieron de ambas maneras.

Creo que cuando uno decide comprar libros de editoriales de larga trayectoria, uno confía en la calidad del producto que vende, por eso me parece preocupante que cada vez sea más repetitivo estos fallos en sus publicaciones. Por eso espero que si alguien de la editorial llega a leer esta reseña tome este mensaje de manera constructiva para mejorar y no como un ataque, que nunca será mi intención.

En definitiva, no logré comprender lo que la escritora y la editorial nos vende en esta primera entrega, ¿un libro de romance con tintes eróticos? o simplemente, ¿una novela de sexo con tintes de romance (muy muy muyyyyy) en el fondo? Quizás el error estuvo en que nos quisieron mostrar a una chica libre que tiene las mismas oportunidades de forjar su futuro y resolver sus dificultades como puede, pero siento que la escritora erró el camino, porque al final el mensaje que deja la novela es la historia de una chica fácil que cobra por acostarse con los hombres. Y lamentablemente entiendo que esta pueda ser la realidad de muchas mujeres, pero por favor no quieran venderme la historia como una historia de romance-erótico, porque para eso yo necesito sentimientos y aquí de eso no hubo nada.

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